Un espacio para meditar
Te fascinará el árbol de la Pitanga, cuyos pequeños frutos rojos se consumen en zumo o en mermelada en América del Sur, o el árbol de la calabaza, cuyos frutos crecen directamente del tronco y de las ramas, y que a menudo se aprovecha popularmente en México por sus cualidades curativas. Pero el encanto del Huerto de las Flores no se limita únicamente a su exuberante vegetación: Don Francisco de Armas hizo de su propiedad un lugar de meditación en el que se reunían célebres poetas canarios de la época, como Tomás Morales o Alonso Quesada. La belleza de sus jardines, la singularidad de sus especímenes y la historia cultural de todos sus rincones hacen del Huerto de las Flores un lugar que no te puedes perder, tanto si eres un experto o un especialista, como si, simplemente, disfrutas de la naturaleza.